Si, me iré y es muy probable que la mayoria de la gente que hoy no puede estar sin hablar conmigo cada día termine por olvidar el sonido de mi voz. Aun falta tiempo para que salga de esta ciudad, pero es ahora cuando empiezo a darme cuenta de todo lo que dejaré atras. Mi familia, vivir lejos de ese comidas en las que todos rien escuchando mis chistes, las fechas señaladas en las que nos reunimos para celebrar. Mi hogar, añoraré dormir en la cama que ha velado mis sueños durante tantos años, los desayunos discutiendo de bobadas con mi hermana pequeña o las noches tumbada en el sofá junto a mi madre. Mi ciudad, la misma que recorro cada día casi por rutina, los paisajes verdes e inmensos de su alrededor.
Aunque he de admitir que lo que mas me dolerá sera dejar a mis amigos, aquellos con los que las tardes son inolvidables, los mismo que me cuidan y protegen, aquellos que me hacen feliz con tanta ilusión. Echaré de menos el sonido de sus risas y los abrazos con cariño que me reciebn cada día. Se que no olvidaré sus rostros, aunque ellos algun día no recuerden el mio.
Y no, no tengo miedo a perder nada de eso porque se que merezco cumplir mi sueño porque he luchado y lucharé por estar donde siempre he querido.
Pero hay algo que por mas que desee no puedo borrar de mi mente. Sus lagrimas al pensar que me olvidaré de sus ojos, de todos esos momentos y recuerdos que hemos construido.
Lo unico que mi cuerpo no puede soportar es alejarme de su sonrisa, del sonido de su voz, de los abrazos...
Se que esa pequeña niña sufrirá los primeros dias y quizás le cueste afrontar las cosas sin mi ayuda, y eso será loq ue mas me duele, no estar cada vez que llore o que necesite un abrazo, no estar velando su sueño mientras descansa tranquila, no ser el pialr de su vida...
Alejarme de su vida será el mayor sacrificio.
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